Revista Obtura

Nuestra ciudad es un ente bello por méritos propios. Llena de misticismo, magia y una vida propia que asombra hasta a aquellos visitantes que habían creído ya ser testigos de todo. Sin embargo, el trajín que la mantiene funcionando devora energías, almas y conciencias de todos aquellos corazones que habitamos en este gigantesco dragón de asfalto.
Para escapar de la rutina y voracidad de la antigua Tenochtitlan, México ofrece un sinfín de rutas a los lugares más insospechados. El Ecoturismo en Hidalgo representa la comunión activa entre nuestra humanidad con su naturaleza. Así, el forastero desitla el estrés cotidiano rodeado de fastuosos paisajes esmeraldas. A su vez, las Iglesias en Puebla rescatan ante nuestros ojos el fervor novohispano y lo eleva a una expresión casi tan altísima, como aquel dios a quien intentaron llevar su mensaje.
Es esto una minúscula, pero fehaciente muestra de la belleza que esconde nuestra nación.


Iglesias en Puebla
Ecoturismo en Hidalgo